martes, 14 de enero de 2014

PR Illa de Portitxol



Este fin de semana realizamos una pequeña pero fantástica ruta familiar en el término municipal de Xàbia. Tomando como punto de origen el espectacular mirador de la Creu de Portitxol, recorrimos las sendas locales SL-CV 97 Cala Barraca junto a la SL-CV 98 hacia el Cap Prim. Un corto trayecto de unos escasos 4 kilómetros, a través de esta maravillosa había repleta de bellos paisajes auténticamente mediterraneos, donde podremos disfrutar de una variada vegetación de densos pinares, así como espliego, romero, brezo, etc... declarados microreservas botánicas por la Consellería de Medi Ambient.

 
 

Antes de recorrer este pequeño sendero, podemos recreamos con las magnificas vistas desde el singular mirador de la Creu de Portitxol. Nuestra pequeña ruta de hoy transcurre alrededor de la preciosa bahía de Portitxol, limitando al sur con el Cap Negre y al norte con el Cap Prim. Primero visitamos la tranquila y apacible Cala Barraca. Para llegar a este enclave único, debemos descender a través de un bonito sendero donde podemos disfrutar del encanto el paisaje repleto de pinos y matorrales. A medida que nos acercamos a la cala, el terreno se vuelve más arcilloso, encontrando zonas algo quebradizas. Gracias a los estribos de maderas situados en estas zonas, facilitan la bajada hasta alcanzar la playa. Nada más llegar quedamos prendados por la belleza del entorno, un magnífico lugar para poder relajarnos y disfrutar sosegadamente del paisaje. A nuestra izquierda veremos la pequeña Illa de Portitxol, a nuestra derecha el imponente Cap Negre. Ahora nos encaminamos al otro extremo de la había, en dirección norte. Para ello volvemos a remontar hacia la Creu, desde ese punto se inicia el sendero SL-CV 98 hacia el Cap Prim. Este tramo presenta menos desnivel que el anterior, aún así, debemos descender inicialmente hasta llegar a la zona de los acantilados. En este punto la senda va perfilado el acantilado, encontrando varios miradores durante el trayecto. Las vistas son únicas, casi idílicas, el color azulado del mar contrasta con el tono gris del litoral, un auténtico regalo para los sentidos. A pocos metros encontraremos una pequeña elevación hasta alcanzar la cima del Cap Prim. Desde este punto elevado, contemplaremos con toda claridad la había de Xàbia, en el centro veremos el impresionante macizo del Montgó y a un extremo la prolongación del Cap de Sant Antoni. En esta época del año encontraremos un mar en calma, este fenómeno se denomina "las calmas de Enero". El mar está como una balsa de aceite, gracias a la ausencia de vientos acompañado de una ligera subida de las temperaturas. Después de disfrutar del paisaje, volvemos sobre nuestros pasos ascendiendo otra vez hacia el mirador de Portitxol. Donde pondremos punto final a esta espectacular e ineludible propuesta desde Xàbia.



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