Todo un clásico en bicicleta de carretera, situado en el centro de la comarca de La Marina Alta, el Coll de Rates es mucho más que un referente para aficionados y amantes de este deporte. Sus aproximadamente 628 mtsde altitud, en poco más de 6 kms de revirado recorrido, hacen de esta ascensión un desafío ineludible, para cualquier apasionado del ciclismo. A pesar del intenso frío matinal, tres intrépidos componentes de LMM, decidieron embarcarse en este derrotero, tras la sugerencia del Teacher. La nueva adquisición del Maestro, una fantástica Specialized S-Works de carbono, servía de excusa para probarla en carretera, y que mejor ensayo que la subida al Coll de Rates. Para llegar al inicio de esta ascensión, en el pueblo de Parcent, tuvimos que recorrer las poblaciones de Beniarbeig, Pedreguer y la siempre exigente subida a la Llosa de Camacho, que tan buenos recuerdos me trae. Además disfrutamos como niños, en el posterior descenso hacia Alcalalí, donde Hidden demostró su gran hegemonía en esta materia. Tras Alcalalí, llegamos al pueblo de Parcent, donde se podía contemplar a nuestra izquierda, la interminable recta que culmina en el Coll de Rates.
En la foto podemos apreciar la larga y sufrida ascensión hacia el Coll de Rates (izq.)
Uno de los pósters indicativos (Stoppomat) de la distancia que falta al collado y el desnivel en ese punto.
Espectaculares vistas de uno de los múltiples miradores del Coll de Rates, a la izq. el mítico Cavall Vert.
Particularmente dividiría la ascensión al Coll de Rates, en tres tramos bien diferenciados. El primero, comprende desde el inicio de la ascensión, en la zona dels Racons, hasta llegar a las antenas, con un recorrido de 3,1 kms aproximadamente. Esta zona es bastante revirada, con numerosas curvas y con bastante vegetación en los primeros metros, que nos ayudará a protegernos del Sol. Personalmente, es la parte que más se me atraganta, de hecho mis dos compañeros se distanciaron muy fácilmente. La segunda parte, da comienzo en las antenas hasta llegar al inicio de la larga recta que encara al collado, con 1,3 kms de longitud. En esta parte del recorrido, llamado El Replà, es mucho más corta y con menos desnivel que la anterior, pero en cambio, sufrimos el fuerte viento, que normalmente sopla en este lado de la montaña. Y por último, la interminable recta de 2 kms hasta coronar el Coll de Rates. A lo largo de esta larguísima recta de la cv-715, encontraremos un primer tramo algo más exigente y una parte final algo más suave. A medida que ascendemos, las vistas son cada vez más increíbles, pero es el alto del collado, donde realmente podemos disfrutar de la belleza sin comparación de esta comarca. Decir tiene, que mis compañeros de aventura, Teacher y Hidden, llevan un buen rato esperando mi llegada, mientras, se deleitaban del esplendido paisaje.
Bonita fotografía desde el Coll de Rates, al fondo podemos divisar el macizo del Montgó.
Últimos metros antes de coronar el collado, en frente la colosal Penya Talai de 783m de altitud.
Que dos fenómenos...!!! Celebrando la culminación de la ascensión al Coll de Rates.
Tras mi llegada, deliberamos donde iríamos a almorzar. Ante tanto titubeo, el Maestro propuso la cercana población de Tárbena, así si que sin más dilación, nos encaminamos a Casa Pinet. Pero aún faltaba un último repecho, poco antes del merecido aperitivo. Ya muy cerca de la mencionada población, y en plena ascensión, pudimos contemplar todo el paraje de la Foia de Sabaig (fotografía más abajo) y como no, en un pequeño recuadro a lo lejos, el Mar Mediterráneo. Al llegar a Casa Pinet, no podía faltar un clásico en este bar, "mallorquina amb mel", simplemente excepcional. Tras finalizar con una buena mistela, nos dispusimos a regresar a casa, realizando el mismo trayecto pero a la inversa. Al final y sin darnos cuenta, realizamos más de 72 kms de recorrido y un desnivel acumulado de aproximadamente 1722 mts. Hasta la próxima amigos.
Fantásticas vistas de la Foia de Sabaig, al fondo a la izquierda el Coll de Rates.
Casa Pinet en Tárbena.
Todo un clásico, originario de los primeros mallorquines que repoblaron estas tierras después de la expulsión morisca en 1609.
"¿Pensáis de verdad en las consecuencias de un guerra indefinida? No nos rendiremos en ninguna plaza o castillo que pretendáis ocupar. Alcanzad vuestros deseos si podéis. Acaso os lleve toda la vida..."
Con estas palabras contestó el caudillo Al-Azraq al rey Jaume I, tras caer derrotado, este último, en la batalla de Cullera en 1235. Después de cada contienda, el rey musulmán retornaba a su refugio en el castillo-palacio d'Alcalá.
Por ello, hemos elaborado este fantástico recorrido repleto de muchos ingredientes que poco a poco iré desgranando en esta crónica, a través de toda la comarca de Vall d'Alcalà, rememorando vestigios de una historia realmente fascinante en una época repleta de contiendas, intrigas, traiciones y como no, de paz y convivencia entre los pueblos cristianos, judíos y musulmanes.
En esta espléndida aventura, tuve la suerte de contar con The Bull atraído por la seductora propuesta del trazado. Así pues, tomamos rumbo a las 6:00h hacia la población de Benialí en la Vall de Gallinera. Allí descargamos nuestras bicis y pusimos todo a punto, rumbo a esta alucinante empresa. También deciros que este trazado coincide en un 80% con la marxa BTT Alcalà de la Jovada del año pasado, con lo cual, también tenemos garantizado trazados más técnicos y adaptados para nuestro "downhill", The Bull.
Nada más recorrer los primeros metros, nos encontramos con durísimos repechos que nos acompañaran durante unos 3,5 kms. Así pues sin más dilación, introducimos el plato pequeño y piñón grande para protegernos de alguna posible lesión, ya que apenas habíamos calentado al inicio de la ruta. Tras llegar a la cima de esta sufrida subida, encontramos el fantástico Mirador del Xap. Al asomarnos a la depresión de este valle, quedamos fascinados por las fantásticas vistas sobre toda la Vall de Gallinera.
Preparando las monturas poco antes de iniciar este periplo por tierras moriscas.
Aún algo exhaustos a nuestra llegada al mirador de Xap,...
...la gran y merecida recompensa, la tenéis plasmada en esta fantástica fotografía.
Vistas desde el Mirador del Xap, entre los valles de Gallinera y Alcalà, con el mar de fondo.
Tras contemplar las fascinantes panorámicas sobre todo el valle, retomamos el camino hacia la población de Alcalà de la Jovada. Durante esta parte del trazado, cabe destacar la vistas hacia la Serra de la Foradada y la visita al despoblat morisc d'Atzuvieta. En este último emplazamiento nos detuvimos con detenimiento, ya que representa el poblado morisco mejor conservado de toda la Comunidad Valenciana. Tras curiosear con esmero este conjunto arquitectónico, donde llegaron a vivir hasta 17 familias hasta su expulsión en 1609 por orden del rey Felipe III, continuamos el viaje hacia el pequeño pueblo d'Alcalà.
The Bull posando en frente de la siempre enigmática Foradà, en el camí dels Corrals del Paet.
Camino que nos conduciría al despoblat d'Atzuvieta, muy cerca d'Alcalà de la Jovada.
No queríamos perder detalle de como convivían en este curioso emplazamiento.
Nada más llegar a Alcalà, nos dirigimos al lugar más emblemático de esta población, su plaza Mayor. Allí encontramos una fuente representada por el rostro del rey Al-Azraq que significa "el de los ojos azules". También contemplamos su antiguo palacio y mezquita, hoy en día convertido en un conjunto de casas y en una iglesia. Tras beber de la mencionada fuente, retomamos el camino en busca de la Muntanya Sud, donde daría comienzo realmente, el trazado más duro de toda la jornada.
Cruzando un antiguo puente poco después de visitar el despoblat d'Atzubieta.
Fuente de Al-Azraq en Alcalà de la Jovada.
Lugar donde tuvo lugar la firma del Tractat del Pouet en 1245.
A pocos metros del inicio del camí de Moll, encontramos un placa conmemorativa que hace referencia al Tractat del Pouet de 1245. Dicho tratado, ponía fin a largas discusiones con el reino de Valencia de Jaume I, así pues, se dispuso el reparto de los 17 castillos y alquerías que poseía hasta entonces el caudillo musulmán, además de declararse vasallo del infante don Alfons d'Aragó, hijo de Jaume I. Algunos castillos se entregaron de inmediato, otros deberían ser entregados en un plazo máximo de 3 años, pero no se cumplió lo pactado y hubo varios levantamientos. Tras varios enfrentamientos con tropas cristianas, Al-Azraq fue vencido, y muerto en el asedio de Alcoi de 1276.
Continuando el camino en sentido ascendente, encontraremos el despoblado morisco de Saltes, situado a 735 mts de altitud, que hasta hace bien poco, era aún utilizado como corrales-refugio para animales. Esta parte del recorrido es bastante agradecida, tanto por la limpia superficie de la pista forestal, como por los paisajes que podemos admirar, llegando a divisar con bastante claridad las sierras de Benicadell y Mariola.
Un descomunal The Bull, de ahí su sobrenombre, remontando esta bonita pero dura subida.
Bonita panorámica de la Serra d'Alfaro, en el corazón de las sierras alicantinas.
Llegada al Mas de Capa i Mona de origen musulmán.
Nuestro siguiente punto de interés, sería el antiguo caserío de Capa i Mona que data de la época musulmana, poco antes de la ocupación morisca. Cerca de allí, podemos encontrar restos de una antigua mezquita orientada a La Meca. Según nos relataron, hasta el siglo pasado estuvo aún en funcionamiento, dándonos una ligera idea de la extrema dureza del trabajo diario de estas gentes, en un lugar apartado de la civilización y sumamente inhóspito.
El siguiente punto sería el impresionante barranc de Malafí, situado en la falda de la Ombria de la Serra d'Alfaro. A partir de este lugar, el camino se hace muy intransitable, ya que debemos entrecruzar en varias ocasiones el barranc de Paet, repleto de piedras de cierta consideración. Aunque no es imposible superarlo... para ejemplo la masterclass que se marco mi compañero The Bull, recorriendo este técnico trazado.
Temperatura algo fría para esta época de año, pero que en algunos tramos era de agradecer.
Foto tomada en el descenso hacia al barranc de Malafí.
Espectacular y escarpado descenso cerca del barranc de Paet.
Tras alcanzar el Pou de Paet, volvimos a encontramos con unas durísimas rampas, aunque en esta ocasión eran mucho más ciclables. Las fuerzas ya empezaban a flaquear después de tantas horas de camino, era el momento de tomar un par de geles con carbohidratos para poder afrontar con garantías el resto de la aventura. Tras superar la interminable cuesta, llegamos por fin hasta la pista de aterrizaje (punto más alto del recorrido con 808 mts de altitud), aquí encontramos la Nevara d'Alt. Ahora tocaba descender hasta la Nevera de Baix, donde si teníamos pensado hacer un alto, recorriendo pistas forestales y senderos muy accidentados. Esta parte del recorrido es muy técnica, con numerosas piedras sueltas y grandes surcos. Tal fue la dureza de la bajada, que al finalizarla teníamos los brazos doloridos por la tensión ejercida durante el largo descenso.
Pista de aterrizaje contra incendios situada en el término d'Alcalà de la Jovada.
Inicio del descenso hacia la nevera de Baix.
Grande Xplorer, encima de la cúpula de la nevera de Baix.
Nos dirigimos a la mencionada nevara, que se encuentra en un perfecto estado de conservación. Este antiguo pozo de hielo, era utilizado antaño para la comercialización de bloques de hielo, conservación de alimentos, también para uso sanitario en la elaboración de medicamentos y tratamiento de enfermedades, en las poblaciones más costeras como Gandía y Denía. Tras cruzar de nuevo la comarcal cv-712, nos encaminamos hacia el camí dels Corrals del Paet, buscando el camino de retorno hacia el punto de partida. Al llegar al Mirador de Xap, el descomunal descenso que se nos presentaba hasta Benialí, sugería una extrema precaución, debido a las fuertes rachas de viento. Tras casi 6 horas de peripecias por el interior de la sierras alicantinas, llego el momento de saborear y compartir los sabores de la gastronomía local, con una buena ración de "espencat" y como no, de "figatells amb ceba". Poniendo punto final a este fascinante episodio, que seguro recordaremos durante larguísimo tiempo.
Merecida y justa recompensa, después de la dura pero gratificante aventura.
DATOS TÉCNICOS, TRACK, MAPA Y VÍDEO DEL RECORRIDO
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=4522586 * * Esta ruta ha sido modificada y mejorada, para poder ejecutarla más comodamente. Se han suprimido varios tramos del trayecto realizado, como el barranc de Malafí, etc...Esta última propuesta mejora la ruta anterior en muchos sentidos.
Todos y cada uno de los fines de semana intentamos superarnos y mejorar en todos los sentidos, la ruta de la semana anterior. Pero el trayecto que tenía preparado nuestro explorador por excelencia Xplorer, dejó atónito al resto del grupo. Coincidiendo con dos verdaderos "downhills", realizamos un bucle muy técnico entre las poblaciones de Gata de Gorgos y Lliber. La ruta tiene prácticamente de todo, un desnivel muy exigente con un acumulado de casi 900 mts, numerosas y variopintas sendas, trialeras muy irregulares y de puro vértigo, además de fabulosas pistas, sobretodo en la zona de la Serra de Seldetes.
Mad Horse y The Bull atravesando las vias del TRAM de camino a Gata.
Como os he comentado anteriormente, el verdadero trayecto que nos ocupa en esta salida, da empiezo desde el Camí de La Font de La Mata,en la población de Gata de Gorgos. Para ello hemos tenido que recorrer más de 13 kilómetros de caminos rurales. Nada más cruzar el ríu Gorgos, se nos presenta unas rampas de aquí te espero, y como no podía ser de otra forma, el amigo Mad Horse, en una demostración de derroche físico casi insultante, ejecutó este durísimo repecho sin apenas despeinarse. Para alcanzar La Font, recorrimos un precioso paraje sin casi tráfico, uno de los preferidos del Teacher, en combinación con un tramo sobre tierra bastante amplio, que nos sirvió de prólogo poco antes de llegar a la fuente.
Últimos metros de duro ascenso, poco antes de llegar a La Font de La Mata.
Tras alcanzar este punto, nos topamos con un grupo de bikers "40 en amunt" del pueblo de El Verger, los cuales conocíamos de otros encuentros por la zona. Tras compartir unos breves instantes con ellos, iniciamos el descenso en busca de la ruta de los túneles en dirección a Sénija. Este descenso no defraudó, máxime cuando The Bull y Mad Horse pasaron de largo una intersección llevados por un enloquecedor y frenético descenso que les llevaría cuesta abajo. Reunido el grupo, iniciamos el recorrido de un clásico por los túneles de la AP-7. Este serpenteante trayecto en medio de la Serra de Seldetes no defraudó ni realizandolo en sentido ascendente. Después de perdernos durante unos instantes, mea culpa, llegamos a Sénija. Buscamos de nuevo otra difícil subida que nos conduciría hasta el Camí vell de Lliber, a cambio de este sufrimiento, disfrutamos de un duro y trabajado descenso hasta llegar a la zona del Tossalet cerca de Lliber. Tras atravesar inmensos latifundios de viñedos, llegamos al pueblo Lliber, donde nos esperaba un merecido almuerzo de "figatells amb ceba" en el bar Varetes, situado en la PlazaMayor. Durante el almuerzo, contemplamos un autentico batallón de ciclistas y bikers, con un estado físico verdaderamente admirable, sin hablar de sus fenomenales máquinas que quitaban el hipo.
Inicio del Camí vell de Lliber.
Contemplando la fabulosa Serra de Bèrnia, poco antes de iniciar el descenso a Lliber.
Buen almuerzo en el bar Varetes, cumplía con creces la regla de las 3B.
Reemprendimos el camino hacia la ansiada senda de Les Terrases, catalogada por muchos como la mejor de toda La Marina. Para alcanzar este tramo, volvimos a ascender recorriendo toda la zona de Mequinenza. Tras localizarla, los dos alocados compañeros, iniciaron mano a mano, un vertiginoso descenso por dicha senda de apenas un kilómetro de recorrido, que no defraudó las expectativas creadas. El tramo es rápido y bastante regular en términos generales, dando poco margen al error debido a la estrechez de la senda. Además, existen varios puntos con cierta pendiente, donde no hay tiempo a vacilar.También se presentan varias curvas cerradas, destacando la escasez de piedras sueltas durante todo el tramo. Tras llegar a la zona baja, coincidimos en que posiblemente sea una de las mejores sendas o por lo menos, de las favoritas.
Inicio de la senda de Les Terrases de la Torre.
Mad Horse, en la última pendiente de la senda de Les Terrases.
El amigo The Bull, haciendo fácil lo difícil.
En resumen, la etapa ha sido muy dura tanto físicamente, con más de 58 kms de duros desniveles, como técnicamente, con un amplísimo abanico de senderos de todo tipo, que han servido para ir puliendo nuestra técnica. También ha servido esta salida para que nuestro intratable Mad Horse, pusiera a punto su próxima cita en la marcha en BTT de Cofrentes, suerte campeón.
Completísima y variada propuesta dominical recorriendo un sinfín de sendas en la zona de Les Valls (Jesús Pobre), situada entre la Serra de Seldetes y el macizo del Montgó. En esta ocasión tuvimos el privilegio de contar con la presencia de nuestro más erudito alquimista, Taurine, experto en la elaboración de todo tipo de brebajes. La ruta no pretendía ser pretenciosa, teníamos que cuidar con rigurosa delicadeza la excesiva inactividad física del mencionado alquimista. Y porque no decirlo, también respetando la baja forma de quien os escribe. Sin apenas desnivel acumulado, exceptuando un par de rampas que nos hicieron sacar los colores a más uno, el trayecto es de los más divertidos, entretenidos y variados que podemos encontrar en esta zona de La Marina. Encontraremos sendas de todo tipo: rápidas, reviradas, enfangadas por las desmesuradas lluvias de la semana anterior, toboganes de diferente ejecución, zonas técnicas, etc.., un verdadero vergel para disfrute de los amantes de mountain bike y la naturaleza.
Mad Horse poniendo a punto su innata destreza, con la mirada puesta en la próxima marcha BTT en Cofrentes.
Taurine no defraudó y demostró su gran oficio sobre la bici, a pesar de su larga inactividad.
Como siempre los primeros kilómetros desde la playa de Les Deveses hasta llegar al punto de contacto en la Punta de Benimaquia, sirvieron para ir calentando motores. Allí rescatamos a Taurine, dirigiéndonos a la zona del Bisserot donde nos esperaba la primera rampa de cierta dificultad de la jornada. En esta parte de la ruta, teníamos en mente enlazar una senda que desciende desde el Coll de Pous y que nos llevaría hasta el pequeño y denso bosque dels Mitjans. Xplorer, sugirió separarnos en dos grupos para ejecutar mejor las dos variantes posibles, pero el indomable Mad Horse insistió en que permaneciéramos juntos, en un alarde de gran compañerismo. Este tramo dels Mitjans no defraudó, es más, descubrimos una senda de nueva creación que nos llevaría hasta la misma urbanización Toscamar (no trazada en track de wikiloc). A pocos metros y tras cruzar la comarcal cv- 734, nos introducimos de pleno en la zona de Les Valls. Aquí encontraremos un paisaje algo más despejado, repleto de abundantes campos de viñedos, en medio de una gran maraña de caminos rurales.
Preciosa foto del Teacher recorriendo la zona de Les Valls.
Como os he comentado anteriormente, esta propuesta tenía de todo un poco.
Tras cruzar la franja de Les Valls de punta a punta, pusimos rumbo a la zona de Les Catarriges donde nos esperaba la siempre entretenida pista de cross. Poco antes de llegar, tuvimos que encarar una fuerte pared con desniveles del 20%, donde el Teacher y Mad Horse marcaron como siempre las diferencias. Llegados al circuito y después de la tradicional foto de rigor, Xplorer volvió a sugerir el descubrimiento de una nueva variante que enlazaba algo más abajo con la senda tradicional. Tras dar el visto bueno por parte del respetable, nos encaminamos hacia dicha senda. Después de localizarla, nos encontramos con una atrevida y temeraria trialera con multitud de piedras, como observaréis más hacia adelante en el vídeo. Completado ya el intrépido circuito, llegamos al cauce del río Gorgos, donde tomamos dirección al pueblo de La Xara. Allí nos esperaba en principio el imprescindible almuerzo. Pero antes debíamos volver a introducirnos de nuevo en la zona de Les Valls, en esta ocasión los caminos fueron menos compasivos y tuvimos que atravesar verdaderos barrizales, llevando las ruedas traseras de lado a lado del camino. Mención especial al Teacher, demostrando en todo momento un entereza admirable, ejecutando todos y cada uno de los tramos propuestos en la jornada.
Los hombres de Harrelson en acción, poco antes de descender la pista hasta el Gorgos.
Espectacular como siempre, el compañero Mad Horse.
El amigo Taurine realizando un verdadero esfuerzo al más puro estilo "tir al rastre".
Poco antes de llegar a La Xara cerca del Tossal dels Molins en Jesús Pobre, teníamos reservada una sorpresa para el indómito Mad Horse, un nuevo tramo muy técnico que hizo las delicias de nuestro amigo. Este trayecto requiere mucha habilidad, con curvas muy cerradas con poco espacio para maniobrar y donde no hay cabida a la vacilación. Después de atravesarlo, con suerte dispar para cada uno de nosotros, nos encaminamos ahora sí, a La Xara, siempre paralelo al barranc de Regatxo.
La única desilusión de la jornada, fue comprobar que nuestro bar predilecto en La Xara, el Saragossa, estaba completamente cerrado. Así que buscamos otra alternativa en la misma población, pero ni punto de comparación. Después de un almuerzo algo decepcionante, nos despedimos de Taurine hasta la próxima ocasión, poniendo rumbo y punto final a esta ruta hacia la zona de Les Deveses.
Llegando al Tossalet dels Molins.
El maestro saliendo del enmarañado pinar cerca de La Xara.
