lunes, 26 de noviembre de 2012

Senda La Sella




En nuestro constante afán por buscar nuevas y diferentes propuestas, encontramos una corta pero interesante senda en el término municipal de Pedreguer. No es un senda muy arraigada entre los bikers del lugar, de hecho aparece muy vagamente en algún que otro buscador de rutas, pero nosotros además, nos hemos atrevido a añadirle un interesante nuevo tramo al ya original, para hacerla así más atractiva si cabe, pero eso sí, con algo más de riesgo debido a la difícil y abrupta orografía que une ambos tramos.

Bonito y apacible camino cerca de la punta de Benimaquia.
Aquí tenéis la otra protagonista de la ruta, mi nueva RR-6.3 recién rectificada.
Adelantamos los planes para el sábado, por culpa de la meteorología. Así que aún, con el asfalto muy húmedo y los caminos embarrados por las lluvias de la noche anterior, iniciamos el camino hacia esta nueva senda situada en la Muntanya de La Sella. Al llegar al Camí de l'Assagador del Palmar, muy cerca del Campo de Golf La Sella, encontraremos una indicación para entrar a la zona residencial que lleva su mismo nombre, tras atravesar un paso a nivel. Nada más entrar, dan comienzo las primeras y empinadas rampas, que nos acompañaran en todo momento hasta llegar al inicio de la senda. Por sorpresa, tuvimos la gran fortuna de toparnos con dos magníficos ejemplares de Pavo Real, que deambulaban tan plácidamente por las calles del complejo residencial. A medida que vamos ganando altura a través de sus casi laberínticas calles, podemos ir observado la gran belleza del Parque Natural del Montgó.

Foto tomada en el inicio del camino, en la llamada Penya Roja.
Cuidadín, cuidadín..., intentamos pasar desapercibidos por la cuenta que nos traía.
El trayecto que nos atañe, tiene una longitud aproximada de 1,8 kms, desde su inicio en la parte alta en la zona de Mirabella hasta llegar al otro extremo de la montaña cerca de Picaxos, donde están situadas las dos pequeñas y peculiares colinas de unos 246 mts cada una. Los primeros metros se realizan sobre un camino de tierra bastante ancho y bastante regular, hasta llegar a la zona de los panales. Durante este recorrido podemos observar todo el valle de La Valls, entre el macizo del Montgó y la Serra de Seldetes, justo en medio del valle encontraremos el Tossalet dels Molins con sus tres molinos, cerca de Jesús Pobre. Aunque nos de la impresión de ser un camino sin salida, es solo en apariencia, ya que debemos escalar unos metros para localizar y enlazar, con una estrecha y peligrosa senda de unos 150 mts de recorrido, que nos conducirá hasta la otra parte del camino. 

Paso estrecho en la Penya Roja que une los dos tramos.
Bonito camino, poco antes del inicio de la senda.
Después de salvar este escollo, seguimos el itinerario por un camino de tierra bastante ancho,   poco antes de llegar a una intersección, donde enlazaremos por nuestra izquierda con la senda original. Esta parte del tramo es mucho más entretenida , transitando por una rápida y estrecha senda, repleta de vaivenes con numerosos cambios de trayectoria. Casi en la parte final, observaremos un pequeño mirador donde contemplaremos las montañas de Pedreguer y La Solana, y también una espectacular panorámica de toda la Serra Segària. A muy pocos metros, volveremos a entrar en el complejo residencial, donde buscaremos el camino de salida. También aprovechamos esta salida, para descubrir un pequeño tramo a través de revirados caminos rurales en la zona de Penya Costa, que nos conduciría en menos tiempo, hasta la población de Ondara.

Tramo de la Senda de La Sella, en su parte final.
Preciosa panorámica de toda la Serra Segària.

lunes, 19 de noviembre de 2012

Vall de Laguar



Hola amigos, esta semana hemos realizado la tradicional y archiconocida ascensión por la comarcal cv-721 al Vall de Laguar. Pero por primera vez, lo hice montado en una bicicleta de carretera. Para la ocasión, estuve acompañado de nuestro estimado Teacher, buen conocedor de este difícil itinerario. En varias ocasiones, hemos llegado hasta la cima de este valle, concretamente en el llamado Collado de Gargas a 759 mts de altitud, obviamente con bicicletas de montaña. Los grandes desarrollos de la MTB pueden franquear, aunque con ciertas dificultades, estos duros desniveles. Por ello, elegimos una ruta con menor desnivel, siendo el pueblo de Benimaurell o "Poble Dalt", situado a unos 534 mts de altitud aproximadamente, el final de nuestra ascensión. Ya que a pocos metros después de este pueblo, aparecen las primeras y empinadas rampas en dirección el collado.

Foto tomada a la salida de Tormos en dirección al Vall de Laguar.
Bravo Teacher, no hay cuesta que haga claudicar al maestro.
Así pues, el domingo bien temprano, aún con el suelo humedecido por las lluvias del día anterior, salimos a la caza de dicha cima. La propuesta no era nada fácil, de hecho tuvimos algunas dudas poco antes a llegar al desvío que nos encaminaba hacia los primeros desniveles, pero nadie dio su brazo a torcer, dando muestra de una gran hombría. Sabíamos que la parte más complicada de la ascensión estaba en el primer tramo hasta llegar a Campell (Poble de Baix). Esta parte de la ruta, tiene una distancia total de unos ocho kilómetros, de los cuales los cuatro primeros, presentan duros repechos y curvas muy reviradas en forma de herradura, en donde solo encontraremos un pequeño "oasis" en un altiplano en los primeros metros de la ascensión. También cabe destacar la belleza del paisaje en estos primeros kilómetros, rodeados de frondosos y siempre balsámicos pinos, para el deleite de nuestros sentidos.

Llegada al Poble de Baix en Vall de Laguar, a unos 352 mts de altitud.
Bonita foto a la salida de Campell, al fondo a la izquierda la Serra Segària y a la derecha el Montgó.
Tras recorrer el siempre entrañable y apacible pueblo de Campell, nos dirigimos al segundo envite de la jornada, Fleix. Entre estas dos pequeñas poblaciones, encontraremos un desnivel mucho más suave, permitiendo dosificar un poco mejor las fuerzas de aquí hasta el final. La vegetación se vuelve menos copiosa, permitiendo descubrir pequeños balcones con vistas magníficas hacia la sierra de la Segària y al macizo del Montgó. También encontraremos una pequeña y olvidada zona verde a mitad del camino, exactamente junto al mirador del Vall de Laguar. En este mirador, podremos disfrutar de unas vistas fabulosas a las mencionadas sierras, con el mar de fondo como gran protagonista, y no podemos olvidarnos, de nuestro querido Barranc de l'Infern.

Fleix, penúltimo pueblo a unos 437 mts de altura, a pocos kilómetros del punto avituallamiento.
 Teacher, más fresco que una rosa, franqueando los últimos metros hasta Benimaurell.
Llegados a Fleix o al Poble d'Enmig, encontraremos infinidad de información sobre la ruta de senderismo pr-147, el Barranc de l'Infern, catalogada por muchos con el sobrenombre de la Catedral del Senderismo. Ya quedaba escasamente un par de kilómetros de ascenso para llegar al punto más alto de la jornada. El gran Maestro me aconsejaba que tomará un poco de  oxígeno bajando al plato de 30 dientes, pero no quería dejarlo solo en este particular "via crucis" con una relación de 34/25, así que para equilibrar las fuerzas mantuve el 39/28. Al llegar a Benimaurell, debimos hacer frente a un último y durísimo repecho, donde echamos el resto, poco antes de llegar al bar. Allí disfrutamos de un fantástico almuerzo, y como no, de una agradable y dilatada conversación. Se hacía un poco tarde y debíamos regresar. El Teacher advirtió de los peligros que podía acarrear un descenso sobre un firme aún mojado, así que extremamos las precauciones al máximo, bajando a medio gas y sin apenas arriesgar. Al llegar al cruce, ya en la parte baja, decidimos alterar la trazado original, así que dimos un rodeo por la mancomunidad de La Rectoría, antes de volver a casa, atravesando las localidades de Orba, Benidoleig, Pedreguer y Beniarbeig.

Llegada al ansiado Poble de Dalt, a unos 534 mts de altitud aproximadamente.
Para mi asombro, degusté "Penca en samorra" típico en esta zona.

TRACK DE LA RUTA

http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=3584451

lunes, 12 de noviembre de 2012

Vall de Gallinera




Clásica ruta cicloturísta de unos 62 kms aproximadamente, por la siempre fantástica Vall de Gallinera, en compañía de nuestro reaparecido Hidden. Después de más de un mes, sin pisar tierras alicantinas y mucho menos, sin subirse a su pobre y arrinconada "Cannondale", era el momento de desempolvar la abandonada máquina y darle el uso que se merece. Para ello, decidimos realizar una atractiva ruta a través de la vertiente de La Vall de Gallinera. En este maravilloso entorno, podemos encontrar sus ocho pequeños, pero apacibles pueblos que conforman un solo ayuntamiento, situado en la pedanía de Benialí. Nosotros realizamos un recorrido hasta el mismo corazón de este valle, concretamente hasta llegar a  la población de Alpatró (punto de retorno). Desde esta localidad, podemos seguir por la comarcal cv-700 en dirección al alto de Margarida (ruta tradicional), pero es a partir de este tramo, donde el desnivel aumenta considerablemente de forma progresiva, en comparación con el desnivel ya acumulado, y no era el día, ni el momento para realizar mayores gestas.

Hidden, devorando los primeros kilómetros de la jornada, en la infinita recta hasta la población de Pego.
Entrada al valle desde Atzúvia, en lo alto de la colina, el castillo medieval de Gallinera a 470 mts de altitud.
 Después de salir de la población de Atzúvia, penetramos en el estrecho y serpenteante paso que va paralelo a la rambla de río Gallinera, preámbulo a la entrada a este alargado valle. Gallinera es un espacio único como siempre os he narrado, repleto de muchos y variados matices, que vamos desgranando poco a poco en cada una de nuestras esporádicas visitas. Nada más entrar al valle, nos encontraremos con el castillo de Gallinera o de Benirrama que servía antaño de puerta de acceso a este rincón de la Marina Alta. También observaremos un póster informativo del encantador itinerario de la "Ruta de los ocho pueblos", que ya realizamos a principios de este mismo año.

Bonita foto a nuestra llegada al pueblo de Benialí, al fondo la Sierra de La Foradada.
Xplorer en el mirador de La Vall.
Durante el trayecto podemos encontrar varias propuestas interesantes, como la subida al espectacular mirador del Xap a unos 628 mts de altitud, donde podemos disfrutar de unas vistas únicas al valle, también podemos visitar los restos del despoblado morisco de l'Alcudia, a las afueras de Benirrama, incluso disfrutar de un pequeño paseo en familia por la senda pr-167 en las faldas de la Costera dels Baladres o bien, visitar las innumerables fuentes que se reparten a lo largo del frondoso valle.

Grande Hidden, no hay desnivel que se le resista.
Fantástica foto de la Penya Foradá a 735 mts, a la altura de La Carroja.

La comarcal cv-700 que atraviesa la Gallinera, presenta un buen firme, además de estar muy bien señalizada y que normalmente está muy poco frecuentada, pudiendo disfrutar más si cabe, de todo su encanto. Os recomiendo visitar el valle a mediados del mes de Marzo, donde seremos  testigos de la espectacular explosión floral de sus tan afamados cerezos. Las cerezas de La Vall de Gallinera están dentro de la denominación de origen "Cerezas de la Montaña Alicantina". Por este motivo, se celebra todos los años a principios del mes de Junio, la tradicional feria gastronómica alrededor de este apreciado fruto.
También os recomiendo, a todos los sibaritas, el "Restautant Sabors". Un lugar magnífico donde se fusiona la cocina tradicional mediterránea, con la cocina de autor http://www.rsabors.es/. Y si buscáis un lugar para descansar, existen varias casas rurales con mucho encanto repartidas por los distintos pueblos de La Gallinera o bien, podéis disfrutar, en plena naturaleza, del Espacio Natural La Garriga, muy cerca de Alpatró. http://www.alicantenatura.es/la-garriga/
Alpatró, llegada al punto de retorno,donde aprovechamos para almorzar.
Hidden y Xplorer, después de reponer fuerzas en el Bar Keles en Alpatró.
Llegados a Alpatró a unos 425 mts de altitud, almorzamos en uno de los cuatro bares que tiene está pequeña población, frecuentada los fines de semana por multitud de ciclistas, de hecho tres de ellos, están situados en la misma calle, así que podréis elegir.  
Como ya he comentado anteriormente, este sería el punto de retorno de la ruta. Desde aquí, realizamos el camino de vuelta a casa, en un rápido y vertiginoso descenso, hasta llegar a la población de Pego, repleto de numerosas y divertidas curvas donde marcamos picos de velocidad máxima de hasta 55 km/h. 



TRACK DE LA RUTA



lunes, 5 de noviembre de 2012

Mirador de la Segària



Llega el periodo otoñal, los tupidos y verdes bosques del verano van poco a poco mutando, transformando el paisaje en una explosión de colores únicos. Entre los meses de Octubre y Diciembre los tonos amarillos y marrones van ganando terreno, y es en esta época de cambio, cuando podemos descubrir una gran variedad de formas y colores inimitables. Contemplando esta metamorfosis natural, nos invita a la reflexión, y es momento de hacer un breve balance de todo lo vivido durante este fructífero año, repleto de grandes recuerdos e instantes inolvidables. Lejos han quedado las salidas estivales en grupo, y en esta nostalgia propia del otoño, es el momento de ir explorando rincones aún inéditos y preparar nuevas metas para el grupo en el año próximo.
Este fin de semana, y poco antes que se presentaran los primeros indicios de frío, decidí realizar todo un clásico en la Segària, el ascenso a sus antenas. Desde hace más de un año, no recordaba haber hecho esta corta pero sufrida ruta. El inicio de esta ascensión, da comienzo en la pequeña población de Ràfol d'Almúnia. A pocos metros de la salida de este pueblo, por la comarcal cv-728 en dirección Pego, veremos una señalización a nuestra derecha que indica el "Camí a la Segària", tomaremos ese desvío que nos llevará en dirección a los repetidores.

Desvío por el Camí de la Segária.
Pendientes muy pronunciadas hacia las antenas de la Segària.
 El itinerario se realiza por un camino rural totalmente asfaltado, existiendo eso sí, varios tramos algo irregulares. Tampoco está señalizado y en algunos puntos hay que extremar la precaución por la baja visibilidad en sus innumerables intersecciones. El recorrido hasta el Mirador de la Segària, desde el desvío, es de unos 3,8 kms aproximadamente. Pasando de unos 80 mts de altitud desde esta primera señalización, hasta los 405 mts ya en la cima. El desnivel medio total asciende a  8,55 %, pero si tomamos la medición desde la segunda y última señalización, la cosa cambia a unos temibles 13,66% de pendiente hasta llegar a lo más alto.
En esta ocasión, no padecí tanto como en las anteriores, también es verdad que subía a mi ritmo y además, creo que con mi nueva RR-6.3 de doble amortiguación, más que lastrarme, hizo más llevadera y cómoda la ascensión, no llegando a utilizar los desarrollos más extremos.

Foto de confirmación a la llegada al Mirador de la Segària, acompañada con mi nueva RR-6.3.
Fabulosa foto de toda la mancomunidad de La Rectoría en la Marina Alta.
La marxal de Pego-Oliva, al fondo a la izq. el pico del Monduber y más al centro, Cullera.
Una de las ventajas, entre comillas, de sufrir en la mayoría de ascensiones, es claramente la gratificante recompensa de unas majestuosas vistas panorámicas. En esta cima del Mirador de la Segària, podemos relajarnos durante unos instantes en una pequeña zona recreativa habilitada para la ocasión. Desde este punto podemos observar, en sus dos vertientes, unas espectaculares vistas de toda la marxal de Pego por un lado, y por el otro, el gran valle de la mancomunidad de La Rectoría, con las sierras del Seguili y Migdía como grandes protagonistas. A pocos metros de allí, veremos una indicación de la senda PR-CV 415 de muy reciente implantación, en dirección a unas antiguas ruinas de un poblado de origen íbero.

Señalización  de la distancia al antiguo poblado íbero a 405 m de altitud.
Bonito recorrido, foto tomada en el descenso hacia la urbanización MontePego.
Otra bonita estampa durante el descenso.

Después de descansar durante unos instantes y alimentar los sentidos con tan fabulosas vistas, quedaba la parte más divertida de la jornada, un descenso vertiginoso hacia la comarcal cv-728 en dirección Pego. La bajada es muy tentadora y fácilmente se pueden alcanzar velocidades de vértigo, pero hay que extremar la precaución, ya que la carretera es muy estrecha, pudiendo encontrarnos con algún tipo de obstáculo en cualquier momento, sin dejarnos margen de error para poder rectificar a tiempo. Al llegar otra vez a la comarcal, me desvié a la derecha, en busca de la suave ascensión hacia lo más alto de la urbanización de MontePego. Desde allí, descendí a través de una multitud de meandros de asfalto, en busca del carril bici que me conduciría hasta casa.



TRACK DE LA RUTA